La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) de Brasil, dio a conocer la muerte de un voluntario al que se le aplicó la vacuna contra COVID-19 realizada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca.
«Con base en los compromisos de confidencialidad ética previstos en el protocolo, las agencias reguladoras implicadas reciben datos parciales referentes a la investigación» realizada por el Comité Internacional de Evaluación y Seguridad, indicó el órgano.
El ensayo era coordinado por la Universidad de Sao Paulo. A pesar de esto, también se informó que las pruebas y ensayos continuarían.
Anvisa, no dio más detalles por la confidencialidad médica de los involucrados en las pruebas, mientras que AstraZeneca evitó hacer comentarios inmediatamente.